Toni Serra*) Abu Ali fue y seguirá siendo un artesano de la imagen audiovisual en movimiento. Como creador e investigador, cultivó por igual los campos de lo político, lo poético y lo estético. En su quehacer supo amigar la doble voluntad de, por un lado, desvelar el entramado violento del sistema capitalista y de su aparato mediático represor —representado en la industria del ocio y del espectáculo— y, por otro, explorar el misterio de la vida y de la existencia alumbrando la posibilidad de un horizonte emancipado de cualquier sistema represor. Aquí está su Legado en primera persona y conjugado por muchas de las personas que caminaron, de algún modo, a su lado.