Icónica, fuerte, tenez, travestinegra y bonita. La pontencia discursiva de Mikaelah se desliza en runway, en cartas o piensos en voz alta. Aquí se archivan y recogen para que la discusión siembre. Ha creado un tejido de pensamiento: el grito coplectivo del ya fue!, la política del joder (de la trava) o el repensar hoy lo humano como política de plantación.
Una serie de contradiscursos radicales contra el feminismo (por blanco), de fugas antirracistas contra la humanidad y continuidades anticoloniales contra el sistema. El cimarronaje de género como propuesta vital.
No pediremos disculpas
por pensar fugas y formas de
descolonizar nuestra experiencia.
No pediremos disuclpas
por ya creer un nuevo sujeto
de un nuevo feminismo siempre
humano.
No pediremos disculpas por
preferir ver a los pueblos
antes que a las feministas.
No.
