Las lúcidas memorias de los años de formación de un pensador imprescindible, que son también un retrato de Alemania bajo el nazismo.
Hans Magnus Enzensberger evoca su infancia, adolescencia y primera juventud: el germen de su trayectoria vital e intelectual. Lo hace optando por el distanciamiento de la tercera persona y la forma del mosaico de escenas, acompañadas por imágenes de personas y objetos que lo rodearon en esos años, cruciales para su construcción como persona y dramáticos en la historia de Alemania.
Asoman el crac del 29 –el año en que nació– y los tiempos convulsos de la República de Weimar; el padre alto funcionario de Correos; el ascenso del nazismo; la guerra y los bombardeos vistos por un niño; el paso por las Juventudes Hitlerianas y su expulsión de ellas; la evacuación de la ciudad al campo; el descubrimiento del Holocausto a través de un documental cuyas imágenes lo acompañarán para siempre; la nueva Alemania de la posguerra; las aspiraciones a convertirse en filósofo; la conferencia de Heidegger a la que asistió y el seminario del profesor Wilhelm Szilasi, recién regresado del exilio; el descubrimiento de París y su bulliciosa vida intelectual...
Un libro imprescindible para completar el perfil de su autor, uno de los grandes pensadores europeos en activo, y muy recomendable para entender la historia contemporánea de Europa. Unas memorias deslumbrantes que logran iluminar el pasado –personal y colectivo– con sagacidad y sensibilidad.